!DOCTYPE html PUBLIC "-//W3C//DTD XHTML 1.0 Strict//EN" "http://www.w3.org/TR/xhtml1/DTD/xhtml1-strict.dtd"> inter shitty 2073: mayo 2006

inter shitty 2073

El blog las verdades relativas, las reflexiones estúpidas y las referencias idiotas. Donde las cosas se aprenden desordenadamente.

29.5.06

The End II


Por tercer post consecutivo la muerte es primera plana en este blog, que empieza a entrar en directa competencia con el ABC en lo que a sección de obituarios se refiere. Esta vez queriendo rendir un pequeño tributo al fotógrafo Iain MacMillan, cuya muerte hace veintiún días pasó un tanto desapercibida. MacMillan fue el encargado de tomar la fotografía que serviría como portada del sublime Abbey Road, último LP grabado por los Beatles.

La famosa imagen retrata a los cuatro beatles cruzando el paso de cebra contiguo a los estudios de grabación Abbey Road, que toman el nombre de la calle londinense donde están ubicados. Fue la primera vez que una portada del grupo no estaba acompañada de ningún acompañamiento gráfico. No se incluía el nombre de la banda ni el del álbum. El fotógrafo tomó una serie de instantáneas de Ringo, Paul, George y John cruzando el mítico paso de peatones durante los diez minutos que duraba uno de los descansos de la grabación del LP. Subido a una escalera, tomó una de las fotografías más icónicas de la música contemporánea y, ya puestos, del siglo XX. Como diría esa vieja tonada tradicional, es una imagen que la conoce hasta el Papa. Y que ha sido imitada y parodiada hasta la saciedad. (Si buscan Abbey Road en las imágenes del guguel se darán cuenta de que además se ha convertido en un clásico en entre las colecciones de fotos que todo el mundo quiere enseñar después de pasar un fin de semana en Londres, muy cerca de la del Big Ben)

MacMillan colaboró posteriormente con Lennon en un par de sus portadas en solitario y con McCartney en los 80, en un curioso ejercicio de autoparodia por ambas partes. La foto, ya saben, también será recordada por aportar ciertas pistas gráficas a la leyenda que aseguraba que Paul había muerto en 1966.



Sobre estas líneas, varios descartes de la mítica sesión del 8 de agosto de 1969 de la que saldría la original ubicada al comienzo del post; una foto de Lennon en 1973, promocional del album Somewhere in New York City; la portada del Paul is Live y, en el fondo, el artista con la que, creemos, puede ser su sobrina. Que le vaya bonito, maestro.

27.5.06

The End


Desmond Dekker (1941 - 2006)

24.5.06

Shaun de la muerte: una historia de amor, pintas de cerveza y zombies!!!

Después de una semana blanca en inter shitty 2073 como las del instituto, he aquí una merecida revisión en cinco puntos a Shaun of the dead, la última gran película británica.

La historia





Shaun es un hombre atrapado en una rutina socialmente impropia para alguien de sus circunstancias. Con la treintena ya cumplida, o a la vuelta de la esquina, nuestro protagonista gana el pan como dependiente de una tienda de electrónica, uno de esos curros que uno jura que son temporales y que con el tiempo se acaban convirtiendo en una "tumba profesional", o como ustedes lo quieran llamar. Su ocio se basa mayormente en reuniones al calor de una tonelada de vasos de pinta vacíos en su pub local, el Winchester, con la inseparable compañía de Ed, su mejor colega.

Liz, la chica con la que lleva saliendo tres años y a la que todavía no ha presentado a su madre, le lanza un ultimatum. Algo tiene que cambiar en su relación, ella no está dispuesta a aguantar otra tarde de alcoholismo en ese antro de mala muerte con el canalla de Ed y el resto de parroquianos perdedores que cada día se dan cita en el Winchester. Su compañero de piso le lanza otro, Ed se tiene que marchar de casa. El muy holgazán se pasa el día jugando a la play, fumando y trapicheando, como si todavía tuviera 18 años. La madurez llama a la puerta de Shaun, y por si fuera poco, tiene a su madre completamente desatendida y a su padrastro venga a tocarle los cojones. Shaun es, pues, un tipo gris, sin motivación. Una más de todas esas personas ojerosas y pálidas que se encuentran en las calles o los autobuses urbanos, como medio muertas, con la existencia a rastras, cada mañana a la hora de trabajar. Esa gente que actua más por frío automatismo que por sentido común.



Como ustedes ya saben, o esperan, todo cambia para Shaun el día en que una horda de no muertos siembran el pánico en la ciudad, ávidos de vísceras y sangre humanas. Con una especie de armaggedon sobrevolando la tierra, el bueno de Shaun se propone poner remedio a tan terrible situación con un bate de cricket en la mano, un elaboradísimo plan en la cabeza y su inseparable Ed. El objetivo es simple. Reunir a sus seres queridos y ponerlos a salvo en el Winchester. Y, entre tanto, aplastar tantas cabezas de esos cabrones como sean necesarias.

El título





Con los que se ganan la vida poniendo títulos a películas extranjeras, me pasa como con los monarcas. No sé hasta que punto merecería la pena deshacernos de ellos. Cierto es que algunas de sus cagadas han dado la vuelta al mundo. Pero no dejan de ser un elemento que despierta el odio y la mofa. O bien te puedes reir de que en España, Shaun of the dead se traduzca como Zombies Party, o bien te entran ganas de salir a la calle a ajustar cuentas al más puro estilo Harry el Sucio. En ambos sentidos, el caso es que esta criticada figura ejerce como elemento de unión entre cinéfilos con un mínimo de sentido común. Como cuando Bart Simpson corta la cabeza a la estatua de Jebbediah Springfield y todo el pueblo se lanza a la calle, antorcha y rastrillo en mano, a la caza del profanador. A veces uno no se da cuenta de lo que importan ciertas cosas hasta que alguien, haciendo alarde de su ignorancia y desinterés, se mea, literalmente, sobre ellas.



Lo del título, en fin, es a todas luces imperdonable. Se carga el homenaje a la película de Romero y encima se pasa por el forro el fantástico guiño de guión, no menos homenaje al género zombie en general, de no querer mentar tal palabra que empieza con zeta a la hora de definir a los no muertos. A la altura del vergonzoso Olvidate de mí y otras traducciones nacionales del estilo.

Los zom... quiero decir, los muertos vivientes



A parte de un par de títulos clásicos, el que esto escribe es un ignorante enciclopédico del género zombie y, por extensión, de gran parte del cine de serie b. Aunque no por ello uno deja de conocer la importancia de la figura del zombie dentro de la mitología popular. Ese infraser que, como si de un sectario opusdeisiano yonqui se tratara, intenta, a base de mordiscos, convertir a la población mundial en un rebaño de imbéciles condenados al sinsentido de la no vida eterna. Para completar este punto os dejo este post, mucho más aclarador y documentado, extraído de los archivos del Dr. Benway, en el que se hace una concisa explicación de lo que es y no es un muerto viviente.

La Parodia

Shaun of the dead es algo más que una parodia de la típica película de zombies. De hecho, en el fondo, es una genuina película de zombies. Pero no otra película de muertos vivientes al uso, ni un pastiche comercial hollywoodiense con un montón de cameos y humor de tercero de EGB. Shaun of the dead se vale de un montón de referencias y homenajes del género zombie para hacerse con una personalidad propia dentro del mismo.

El apocalipsis que se nos presenta en Shaun of the dead tiene más de humorístico e ingenioso que de terrorífico. Al fin y al cabo, su protagonista es un pobre hombre reconvertido en héroe. Incapaz de hacer frente a la madurez, pero más que diestro a la hora de dar su merecido a una panda de no muertos ávidos de nuevos cerebros que llevarse al estómago. Como si uno pudiera encontrar su razón de ser el día en que la tierra y sus habitantes parece estar sucumbiendo a un grupo de caníbales descerebrados de sangre, literalmente, helada.

Quizá una de las claves sea el sentido del humor (muy negro e inglés, si es que ambos no son la misma cosa) que la cinta despliega. Aprovecha las claves del género para mofarse de las pelis de muertos vivientes, las renueva y se acaba descojonando de sí misma. Porque a ver quien es el listo que dice que ésta no es un genuino filme zombie. Aunque no menos destacable es la visión acerca de como la sociedad actual, con su reflejo en la televisión, hace caja del fenómeno zombie, como lo convierte en un tema más de los que cada día aparecen en la caja tonta. Los que hayan visto la película me entenderán. A los que no, no me atrevería darles más detalles.

Ya puestos, no me gustaría que quedara en el tintero este homenaje al Western con la elección del nombre del pub preferido de Shaun y Ed. Ahí dentro, por si no se lo imaginan hay uno de estos.



Por cierto, el trabajo del director y coguionista Edgar Wright y del fantástico casting, encabezado Simon Pegg, que da vida a Shaun y es a la vez coguionista de la cinta, hacen todo esto posible. Que si no lo digo ahora, luego se me olvida. Ellos son, por cierto, los responsables de la telecomedia británica Spaced, de la cual no puedo dar muchos detalles porque nunca la he visto.


El DVD

Después de mucho oir hablar sobre la película, la encontré este verano en un videoclub de la ya extinta macrocadena Blockbuster, detalle que no mencionaría si no fuera por el simpático fin de esta entidad del entretenimiento doméstico. En España, por lo visto, esta joya no pudo ser degustada en pantalla grande. En fin, ya saben como funcionan estas cosas.


El DVD, en fin, es de lo más jugoso. Con un montón de extras que sirven de postre exquisito después de degustar el banquete de casquería gore. A parte de los típicos extractos making off, escenas que se quedar con en la sala de montaje, comentario de actores y director hay un par de joyas que completan esa renovada forma de parodiar que se mentaba en el punto anterior. A destacar los hilarantes Plot Holes, una especie de explicación de alguna de las elipsis de Shaun of the dead en formato cómic, cortesía de Óscar Wright (¿hermano del director?), tapando agujeros o algo así. Ustedes mismos lo tienen que ver.

17.5.06

Cosas de palacio

Hoy me van a permitir un post un tanto atípico por estas lides. Tal y como acabó el anterior, dedicado al soberbio disco antimonárquico de los Smiths, podría ser buena idea, para que se echen unas risas, reproducir parte de un artículo bastante curioso publicado en el Guardian hace cosa de un mes. El caso es que con motivo del 80 cumpleaños de la reina Isabel II, la casa real británica se molestó en difundir entre los medios de comunicación isleños la lista de "las ochenta cosas que palacio quiere que sepas acerca de tu reina". Como uno es un amante de las listas estúpidas, he seleccionado estos 39 puntos; algunos de los datos más curiosos, sorprendentes o bizarros de los recogidos entre esta enumeración de despropósitos



1. La reina Isabel II es la monarca número cuarenta desde Guillermo el conquistador.

2. En 2002, a sus 76 primaveras, la reina se convirtió en la monarca más longeva al celebrar sus bodas de oro.

3. Nació en el 17 de Bruton Street en Londres, un 21 de abril de 1926.

4. Habla francés fluido.

5. Como reina, ha recibido más de tres millones de artículos en concepto de correspondencia.

6. Diez primeros ministros británicos la han servido. En este tiempo la Casa Blanca ha contado con 10 inquilinos diferentes.

7. Tony Blair es el primer primer ministro (valga la repetición) en haber nacido durante su mandato.

8. Es la patrona de más de 620 organizaciones y centros de caridad.

9. Ha concedido más de 387.000 condecoraciones. (Algo con mérito, pues es como haber condecorado, uno por uno, a todos los habitantes de la Rioja)

10. Durante su reinado, ha recibido gran variedad de animales. Los más inusuales han sido ubicados en el zoo de Londres. Como los dos jaguares que le regaló e gobierno brasileño o los dos castores negros de Canadá. La reina también ha recibido regalos como piñas, huevos, una caja de caracoles marinos, una arboleda de arces y siete kilos de gambas.

11. La reina mandó su primer email en 1976 desde una base armada.

12. Fue una chica guía y una Sea Ranger.

13. Ha atendido 34 actuaciones Royal Variety durante su reinado.

14. ... ya ha inaugurado 15 puentes en el Reino Unido.

15. ... y ha regentado más de 91 banquetes de estado.

16. Aprendió a conducir en 1945 cuando se alistó al ejército.

17. Viajó en el metro de Londres por primera vez en mayo de 1939, siendo todavía la princesa Isabel.

18. Ha realizado 78 visitas de estado junto a su marido, el Duque de Edimburgo.

19. Tiene 30 ahijados.

20. El primer partido de fútbol al que acudió fue la final de la FA Cup en 1953.

Una reina como para quitarse el sombrero

21. Posee los esturiones, ballenas y delfines que habitan alrededor de las aguas británicas, siguiendo el lema de una estatua del año 1324 que los reconoce como "peces reales"

22. El mensaje de felicitación de la reina después del aterrizaje del primer hombre en la Luna en 1969 (¿?) fue microfilmado y depositado en el satélite en un contenedor de metal. (Pobres selenitas el día que descubran el VHS)

23. La reina ha recibido en palacio a Yuri Gagarin, la primera persona en el espacio; Valentina Tereshkova, la primera mujer en el espacio y a Neil Amstrong, Edwin Aldrin y Michael Collins, tripulantes de la misión Apollo XI.

24. Ha habido seis arzobispos en Canterbury durante su reinado.

25. Ha enviado más de 37.500 postales de navidad.

26. ... y ha regalado más de 78.000 puddings de navidad a los trabajadores de palacio.

27. La reina ha posado para 139 retratos reales, dos de ellos con el Duque de Edimburgo. Siendo el más reciente el elaborado por Rolf Harris en 2005 (detalle del mismo al principio de este post).

28. Hay once estatuas de la reina.

29. Tiene una extensa colección de joyería. La mayoría perteneciente a las famosas joyas de la corona.

30. La reina siempre ha estado especialmente interesada en los caballos y las carreras. Su primer pony, Peggy, le fue regalado a la tierna edad de cuatro años.

31. Los caballos preparados en los establos reales han ganado prácticamente todas las grandes careras británicas durante los últimos 200 años. No en vano la reina cuenta con unos 25 purasangres entrenando en cada temporada.

32. La reina ha llevado a cabo más de 256 visitas oficiales en 129 países.

33. Ha visitado Australia 15 veces, Canadá 23, Jamaica seis y diez Nueva Zelanda. (La envidia me corroe)


La reina de las galaxias


34. En 1997 se creó la primera web oficial del Palacio de Buckinham.

35. La reina ha visitado los sets de populares teleseries británicas (libre traducción de "popular british soap operas" ¿?) como Coronation Street, EastEnders y Emmerdale.

36. En noviembre de 2004 invitó al musical del West End Los Miserables para que actuaran para Jacques Chirac en el castillo de Winsord. (Os invito a que vengais a currar gratis a mi casa)

37. Ella misma actuó en un número de pantomimas en el castillo de Winsord durante la segunda guerra mundial.

38. En junio de 2002 fue la anfitriona de los conciertos en los jardines del palacio de Buckinham para celebrar sus bodas de oro en el trono (golden jubilee).

39. Gracias a aquel evento se convirtió en la primera monarca en ganar el disco de oro cuando fueron vendidas 100.000 copias del cd "Party at the palace".


Y que lo digas

Como ven una vida sencilla, de la calle, de andar por casa. Dedicada al trabajo y a la altura de sus responsabilidades. La reina Isabel II es una persona como usted y como yo. Después de leer esta serie de factores seguro que están de acuerdo conmigo en la sensación de alivio. Por lo anteriormente expuesto, las monarquías de hoy en día no tienen nada que ver con las de antaño. Nuestros soberanos son gente con vidas normales, sin grandes lujos que ustedes o yo no nos podamos permitir. Nada que ver con la opulencia de las casas reales de hace trescientos años. De hecho, podríamos decir que a día de hoy el trabajo de monarca se asemeja al de gris oficinista, vendedor de cupones, empleado de banca, albañil o carpintero. Además, desde la invención de internet y del home cinema, cualquiera puede sentirse como un rey en su propia casa.

Y, para que no se vayan de vacío, les dejo con los 10 puntos que algún redactor cachondo del Guardian pensó que se habían olvidado de mencionar.

1. El presupuesto real concedido por el gobierno para financiar las labores oficiales asciende a 36.7 millones de libras. (Hagan ustedes mismos la conversión a pesetas, que es la única forma de enterarse, 1 libra = 1.5 Euros; 1 Euro = 166,386 pesetas)

2. En 1964, un 30% de los votantes británicos pensaba que la reina habíasido escogida con la mano de dios.

3. A principios de siglo XXI la opinión pública ha cambiado dramáticamente. Solo el 44% piensa que Gran Bretaña iría peor sin la monarquía.

4. Famosa por su austeridad, la reina ordenó a sus sirvientes que evitaran caminar por el centro de los pasillos de palacio para evitar el desgaste innecesario de las alfombras reales.

5. En 1978, un grupo antimonárquico del college del Corpus Christi en Cambridge, tocaron el tema de los Sex Pistols God Save the Queen, al principio de la visita al college del duque de Edimburgo.

6. La reina fue elegida hombre del año de la revista Times en 1952.

7. "Y ustedes, ¿a qué se dedican?", preguntó su majestad a Brian May, Jimmy Page, Eric Clapton y Jeff Beck.


Led .. ¿qué?

8. En noviembre de 2000, la reina prohibió a todo visitante del palacio de Buckinham a llevar teléfonos móviles. Según el Sun, "a la reina no le hacía demasiada gracia que los teléfonos empezaran a sonar incesantemente", especialmente en las comidas reales.

9. Una encuesta estimó que uno de diez británicos consideran una buena inversión gubernamental el presupuesto dedicado a la familia real británica, y uno de cuatro piensa que sus miembros son trabajadores.

10. Un reportaje llevado a cabo por un periodista de incógnito del diario Daily Mail reveló que la mesa de desayuno de la reina está adornada con un tupperware que contiene los cereales favoritos de la reina.



Nuestro monarca, tan campechano como siempre, posa con su disfraz de Magneto

En fin, que después de tanto dato, solo puedo reflejar, para terminar de una vez por todo esto, una serie de preguntas que se me plantean. ¿Para cuándo una lista con los cien mejores gags pergeñados por ese tipo tan campechano que es nuestro rey, incluyendo su inefable imitación de Chiquito de la Calzada? ¿Llegará nuestro rey a los ochenta?, pero lo que es más importante ¿hará también una lista como esta? ¿Cuántos records Guinnes ostenta la reina de Inglaterra? Pero sobre todo, ¿cuántos momentos, cifras y personajes bizarros se perderían para siempre con la abolición de las monarquías? ¿Realmente merece la pena apoyar la causa republicana? Me voy a sentar a releer el Hola dedicado al nacimiento de Leonor que me mandó mi madre y a reflexionar sobre estas preguntas... perdonen la chapa.

14.5.06

La reina murió (o al menos debió morir) hace yo veinte años:

Durante estos meses de ausencia se me han escapado un montón aniversarios que sin duda alguna hubieran formado parte de las peculiares efemérides de inter shitty 2073. Los veinticinco años de la muerte de John Lennon, en diciembre. Los veinte años de la catástrofe de Chernobil. El ochenta cumpleaños de la reina Isabel... Ya saben, ese tipo de fechas que nos sirven de excusa para hablar de temas que, de otra forma, no vendrían mucho a cuento.

Para el primer post de esta "segunda época" he decidido rescatar una de estas efemérides. No es ninguna de las anteriores, pero tiene referencia con la última de las que he enumerado. Aprovechando que, además, me gustaría comenzar con unos cuantos post que versen sobre "motivos británicos", por motivos ya conocidos por ustedes, les invito a que viajen momentáneamente a principios de este año. Es entonces cuando podríamos decir. Hace veinte años, por estas fechas, se publicó The Queen is dead, la obra maestra de The Smiths.

La portada está extraída de un fotograma de la peli La muerte no deserta (protagonizada por Alain Delon)


The Queen is dead nace del regreso de la banda a Manchester, la que era su ciudad natal, en busca del refugio para llevar a cabo el proceso de creación de la cima compositiva más alta del binomio Morrisey/Marr. Todo ocurría un año después de la publicación del también maravilloso Meat is Murder, disco que llegaría al número uno de las listas de ventas en el Reino Unido, sin llegar a suponer un indiscutible punto de inflexión en la carrera de los Smiths como lo llegaría a ser el de la reina muerta. Aunque, no me cabe ninguna duda, que muchos de sus fans tendrían razones de peso para decir todo lo contrario. Yo, la verdad, no he tenido la suerte de conocer a demasiados fans de los Smiths. Y jamás a ninguno que diga que Meat is murder es el mejor disco. Pero haberlos, como las meigas, haylos. Digo yo. Un apunte al respecto, la sintonía de la cabecera de Embrujadas (esa serie) es una versión de baratillo del clásico smith How soon is now?, incluido en Meat is murder. No viene mucho al caso, pero la primera vez que lo descubrí me quedé de piedra. Fue una de esas ocasiones en que dentro de tu cabeza suenan al unísono "no puede ser verdad", "¿por qué?" e "hijosdeputa".


The Smiths en Manchester en aquellos maravillosos mediados de los 80

Es difícil despachar en un par de párrafos la clave de la grandeza de este disco. Y no voy a ser yo el que entre en generalidades para intentar resumir los sentimientos que despierta esta deliciosa colección de diez canciones. Porque el pop, o la música (más allá de un estilo en concreto, con sus limitaciones y clichés) contenida en este incunable es una experiencia que cada uno digiere como puede. El perdedor como héroe, la tristeza, la ironía, un humor más negro que el sobaco de un grillo, el duro invierno golpeando en las ventanas, la soledad, las patadas en los cojones que las circunstancias vitales te propinan regularmente, la necesidad de encontrar una escapatoria, una salida, la felicidad y otros sentimientos del adolescente envejecido como estos son parte esencial del espíritu de The Queen in dead. Al menos en lo que tiene que ver con la parte lírica, factura de Morrisey. Las melodías de Marr, por otra parte, tampoco ayudan a ver un rayo de luz, esperanza, una salida airosa.

Precisamente, veinte años después, todavía existe el debate de si la tristeza congénita, o melancolía, como ellos mismos lo definen, que arrastra cada tema de este excelso álbum es culpa de las composiciones musicales de Marr, que condicionaron las letras de Morrisey o, al contrario, es culpa de éste, con su voz, actitud y letras, que las melodías de Marr sonaran tristes. Hace años fue Morrisey el que puso la primera piedra de este debate afirmando que "sus palabras habían sido inspiradas por la tristeza de las melodías". En una entrevista reciente Marr comentaba lo siguiente: "Ambos reconocíamos la belleza de la melancolía. Solíamos hablar de ello. Acerca de la diferencia entre la depresión y la melancolía. Acerca de como la depresión es, sin más, inservible. Y, sin embargo, de como la melancolía es una emoción real y un lugar real, creativo, que abarca imágenes, música y creatividad que versan sobre el hecho de ser. Estás son cosas sobre las que discutíamos un montón. Yo suelo simplificarlo contando esta historia. 'Si bueno, ya sabes, es un sentimiento como tener la cabeza pegada a la ventana de un autobús en una mañana de un miércoles de noviembre con la lluvia cayendo, conduciendo a través de Manchester'. Eso era a lo que sonaban mis canciones porque me pasé un montón de tiempo haciendo eso. Así que yo creo que Morrisey y yo veníamos del mismo sitio. La melancolía expresiva". Aunque la explicación de Marr no deja de ser una empalmada de las grandes, personalmente me quedo con la figura de la ventana del autobús para describir, en parte, a qué suena este disco y lo que intenta trasmitir esa melancolía de la que habla Marr.



Para diseccionar este disco, canción a canción, casi necesitaríamos un post para cada una. Del divertido alegato republicano del tema que abre el disco, The Queen is dead, a la ironía de Big mouth strikes again; pasando por la profunda tristeza de I know it´s over, uno de mis temas preferidos; no encuentro ninguno desechable o de mero relleno. The Queen is dead es de esos disco en los que parece que cada palabra cuenta, en los que parece que hay un mundo de significados detrás de cada frase, de cada melodía.

El penúltimo corte, la archiconocida There´s a light that never goes out, es quizá el más significativo del los diez que conforman este discazo. No me molesto en traducir la letra:

"Take me out tonight, where there is music and there is people, and their young and alive.
Driving in your car. I never, never want to go home. Because I haven´t got one any more.
Take me out tonight, because I want to see people, and I want to see life.

Driving in your car. Oh please don´t drop me home
Because it's not my home, it´s their home, and I'm wellcome no more.

And if a double dekker bus crashes into us.
To die by your side it´s such a heavenly way to die.
And if a ten ton truck kills the both of us.
To die by your side, well the pleasure, the privilege is mine."

Para mí la letra es insuperable y destila perfectamente el espíritu Smith, por un lado, y del propio pop como estilo musical, por otro. Es un homenaje a todos los que alguna vez hemos sentido la necesidad de sentirnos vivos, comprendidos, parte de la multitud en alguna juerga nocturna en la gran ciudad. Todos los que alguna vez hemos necesitado que nos sacaran de una casa donde ya no éramos bien recibidos y que se había convertido en poco menos que una cárcel. Todos a los que, en alguna noche loca, no nos hubiera importado que un camión de diez toneladas o un autobús de dos pisos nos quitará la vida. Porque sería un punto y final, una bonita y romántica forma de morir, como las estrellas de cine, como James Dean, como Lady Di. Algunos recordaréis la sonrojante versión castellanizada de este tema, Hay una luz que nunca se pagará, cortesía de Mikel Erentxun; clarísima candidata a formar parte de la lista de diez versiones que jamás debieron ver la luz. Digna de un lapidamiento público como los de antaño.

Muérase de una vez, su majestad

Aquel año del señor de 1986, el principe Andrew se casaría con la incontenible Sarah Ferguson, Fergie. Diez años después, en 1996, Lady Diana haría las maletas, con lágrimas en los ojos, y comenzaría una nueva y corta vida en la soltería. Otros diez años más adelante la reina, como apuntábamos al principio, ha cumplido 80 años, convirtiéndose en la monarca británica más longeva de toda la historia. Lo de que la reina murió quedará como anécdota utópica de aquellos grises ochenta en los que Morrisey y Marr recorrían en coche las carreteras de Inglaterra en busca de copias remotas de algunos de sus discos favoritos. Solo podemos decir, no sin un poco de malicia, que veinte años después aquel sueño compartido por los Smiths y tantos otros hijos del tathcherismo en aquellos años, que veían y ven la monarquía como una institución que se debió quedar hace tres siglos con el antiguo régimen, queda mucho más cerca. Con el tiempo, la figura de Isabel II, con sus coronas y sus cetros, viviendo en la irrealidad que desprenden las cosas de palacio, será carne de libro de historia donde los niños se dedicarán a pintar bigotes y escribir bocadillos. Afortunadamente, todo lo que fue y es, lo que cuenta, lo que transmite y lo que sugiere The Queen is dead tiene hoy tanta vigencia como hace veinte años y, probablemente, para un determinado tipo de personas que en algún momento encontramos refugio dentro de estas canciones, no la perderá nunca.

11.5.06

He vuelto (como Terminator)














Desde el último post que tuve a bien colgar en este humilde rincón, amargo como el café sin azúcar, el tiempo ha pasado tan deprisa que casi da vergüenza marcar un punto de retorno. Pero he aquí que una vez reubicado en las islas británicas, con conexión desde mi propia habitación y con la irresistible necesidad de retomar ese discurso de estupideces que caracterizaban a esta humilde bitácora, he decidido retomar este espacio, concebido en un principio para resarcirme del vacío interior que sentía por haber cerrado una dulce etapa de mi vida.

El caso es que hace ya más de seis meses y medio que me ví forzado a abandonar este maravilloso mundo basado en compartir conocimientos inútiles mediante imágenes y palabras. La razón de mi abandono fue, en un principio, mi traslado a tierras del norte, donde intento aprender el idioma de Shakespeare, encontrar chollos en el masificado mercado de productos de segunda mano, ser económicamente independiente y huir del mar de dudas que me acuciaron una vez terminados mis estudios universitarios. Pero todo esto a ustedes no les interesa un pimiento. Así que sin más diré que a partir de hoy, inter shitty 2073 comienza su segunda etapa vital, esperando contar con el buen recibimiento que tuvo en la primera.

Espero que antes de retomar el trajín de posteos y demás, me permitan ponerme un tanto nostálgico y estupendo. Me gustaría, en primer lugar, darles las gracias a todos ustedes, compañeros de parrandas blogosféricas. Durante este periodo de ausencia, mis contados y fugaces contactos con ustedes fueron sinceramente conmovedores. Hay muchas cosas que me gustaría añadir al respecto, pero no les aburriré, pues lo interesante es volver a la actividad y dejarse de excusas, agradecimientos y chorradas. Les he echado mucho de menos, eso sí. Y de nuevo gracias, qué hostias. Al fin y al cabo, perrolutxo es un ente que, pese a sus malas pulgas, tiene un pequeño y tierno corazoncito, al que ustedes han sabido llenar con sus apasionados post, comentarios y demás.

Solo un par de condiciones/aclaraciones antes de empezar. Si retomo inter shitty 2073 es porque me sería casi imposible comenzar un blog desde el principio. No es que uno quiera aprovechar la notoriedad y fama internacional que este tuvo antaño. Más bien, pensar en un nuevo título, plantilla y propósitos se me antoja un trabajo eterno que estancaría la vida de perrolutxo como posteador. Al fin y al cabo, uno iba a acabar hablando de lo mismo... Eso sí, si por nuevos reveses vitales o por mera vagancia, este blog volviera a encontrarse en un parón definitivo, sería inmediatamente clausurado per secula seculorum. Que uno nunca fue amigo de trilogías, salvo excepciones como Regreso al Futuro. Y sólo puedo prometer un mínimo de regularidad debido a mi nueva condición de aciago trabajador de jornada completa. Qué le vamos a hacer. Por supuesto, no podría ejecutar tal regreso sin ponerme al día con nuevos y viejos blogs que forman parte de la cadena del que una vez este fue parte integrante. ¡Cuánta información y locura que me he perdido todo este tiempo!

En fin, que ustedes sabrán perdonar esta resabiada. Por hoy, les dejo con estas agridulces líneas de regreso a lo hijo pródigo. Éste es, lo crean o no, el post que más me ha costado escribir, pese a ser casi el más tonto de todos los posteados. En breve, lo de siempre, ya saben: verdades relativas, reflexiones estúpidas y referencias idiotas. Espero verles pronto, muy pronto, de nuevo.

Web Counter
Hit Counters

Powered by Blogger