!DOCTYPE html PUBLIC "-//W3C//DTD XHTML 1.0 Strict//EN" "http://www.w3.org/TR/xhtml1/DTD/xhtml1-strict.dtd"> inter shitty 2073: junio 2006

inter shitty 2073

El blog las verdades relativas, las reflexiones estúpidas y las referencias idiotas. Donde las cosas se aprenden desordenadamente.

19.6.06

Now you're 64


Aunque llegue con un día de tardanza (publicar antes de las 23:59 del 18 de junio se me ha hecho imposible por motivos laborales) y rompa la continuidad con el último post, de forma imperdonable, mi corazoncito fan me ha obligado a rendirle tributo a Paul McCartney en su 64 cumpleaños.

No es mi intención felicitar cumpleaños por que sí, uno que siempre se olvida de aniversarios y fechas importantes de la gente que quiere. Pero fue Paul quien compuso la fantástica canción When I´m Sixty-Four, cuya letra pueden leer bajo estas líneas. Tema incluído en el disco de 1967, Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band. Y ya pueden ver que el que esto escribe se debe a los clásicos.

Paul compuso la canción como regalo para su padre, que por aquella fecha cumplía los 64. Él entonces tenía 25 primaveras muy bien cumplidas. Así que, 39 años después, la fecha le habrá traido a la cabeza algún que otro recuerdo para acabar pensando, como muchas veces pasa, en lo fugaz e inexorable del paso del tiempo. Estas cuatro décadas se le han tenido que pasar volando.

Aunque, seguramente, lo que más le revuelva la conciencia a Paul es de lo diferentes que son estos 64 a los que imaginó en su canción. De una pareja de viejecitos enamorados que alquilan chalets en la isla de Wight a un recién divorciado de una artista porno. No me hagan caso, que como buen periodista soy un exajerado. Pero, no me digan que no resulta irónico las jugarretas que, a veces, nos gasta la vida. Bendito regalo de cumpleaños. En fin, siempre le quedará el consuelo de que, como aquel que dice, "nadie diría que tiene 64". Ya quisieran muchos de su generación. Unos se van y otros, felices sextegenarios. Sea lo que sea, felices 64, Paul, que cumplas muchos más.



When I get older losing my hair
many years from now
will you still be sending me a valentine
birthday greeting, bottle of wine
If I'd been out till quarter to three
would you lock the door
Will you still need me
Will you still feed me
When I'm sixty-four

You'll be older too
And if you say the word
I could stay with you
I could be handy mending a fuse
when your light have gone
You can knit a sweater by the fireside
Sunday mornings, go for a ride

Doing the garden, digging the weeds
Who could ask for more
Will you still need me
Will you still feed me
When I'm sixty-four

(ver traducción)
Every summer we can rent a cottage on the Isle of Wight,
if it's not too dear
We shall scrimp and save Grandchildren on your knee
Vera, Chuck, and Dave

Send me a postcard, drop me a line
stating point of view i
ndicate precisely what you mean to say
yours sincerely wasting away

Give me your answer
fill in a form mine forever more
Will you still need me
Will you still feed me
When I'm sixty-four

(ver traducción)

16.6.06

Pequeñas y grandes muertes de la historia de la música

Hace poco uno más de una semana me enteré, gracias a este estupedo post cortesía de Mycroft, de la triste desaparición de Billy Preston, mítico teclista que repartió su magia con grandes bandas como Beatles o Rolling Stones. Todo un shock, después de la cantidad de muertes de personalidades ilustres de la música que hemos sufrido en el último mes y pico (ver más abajo).

Billy Preston es, personalmente, la más dolorosa de todas las últimas. Pues su nombre siempre aparecerá ligado a grandes eventos de los que ya hemos dado cuenta cierta ligazón sentimental por aquí, como el último concierto de los Beatles en la mítica azotea. Y, en fin, el single Get Back, que llegó al número uno, fue firmado, casi como excepción de lujo, como los Beatles y Billy Preston. Si alguna vez tienen la oportunidad de visionar el film Let it be, podrán disfrutar de los dedos mágicos de esta figura, a parte de otras discusiones que no vienen al caso.

Billy nos dejó después de padecer durante años una dolencia riñonal. Murió a causa de estas y otras complicaciones el 6 de junio en Arizona. Llevaba unos seis meses en coma. Tenía sólo 59 años.

Como siempre gusta hacer historia, he pensado recopilar en un par de post, a modo de humilde homenaje y con bastante calzador, una serie de recordatorios de algunas de las grandes y pequeñas figuras de la música que tuvieron la desgracia de dejarnos antes de tiempo.

En muchos casos, la mala vida ha relacionado la música contemporánea con la muerte prematura. En otros, la mala fortuna de un accidente, a lo James Dean, es la causa de una desparición inesperada. En casi todos, las causas y circunstancias de las muertes de alguna de estas figuras musicales están envueltas en algún tipo de misterio, de los que crean leyendas a través de las décadas sin que jamás se llegue a saber lo que en realidad sucedió.

La selección es simbólica, entre las fuentes de información que me he ido encontrando por la redacción. Ustedes, como siempre, deberán completar y matizar. Ahí va, pues, esta primera entrega, con los seis primeros músicos de nuestra lista.



Chet Baker (1929 - 1988)

Este famoso trompetista es un ejemplo más de la clásica muerte en extrañas circunstancias. Después de una oscura época final en la que se dice que Chet llegó a consumir hasta diez gramos diarios de cocaína y otros tantos de heroína, el músico falleció trágicamente al caer de la ventana de un hotel de Amsterdam, seguramente bajo los efectos de alguna sustancia dopante. A día de hoy no se sabe si se defenestró por decisión propia o fue arrojado por alguien. Por si visitan esa viciosa ciudad, sepan que hay una placa conmemorativa en el hotel donde Chet pasó los últimos años de su vida. Si no tienen tiempo para viajar, el documental Let´s get lost, dirigido por Bruce Weber, narra la historia de los últimos días del jazzman. Lo dejo sin más como apunte, pues no he tenido la suerte de poder ver esa cinta.



Billie Holliday (1915 - 1959)

Después de una infancia de penurias y sufrimiento, Billie se consagró como una de las voces más míticas de la época dorada del jazz. En su vida privada, en cambio, se la recordará por sus problemas con el alcohol y la heroína, adicciones que le llevarían a pasar alguna temporada en la sombra. Murió de cirrosis a los 44 años. Tenía 70 centavos en su cuenta corriente y 750 dólares atados a su pierna. Algo característico, parece ser, del adicto terminal de una sustancia, demasiado ido para estar pendiente de lo único que necesita para conseguir su siguiente dosis, el maldito dinero, por lo que inventa trucos para no perderlo. Y también de alguien que durante años convivió con la escasez más pertinaz y que siempre temió volver a ser pobre de solemnidad, como diría aquel.



Charlie Parker (1920 - 1955)

Al igual que a Holliday, a Parker le pasaron factura su gusto compulsivo por la heroína, el alcohol, la comida y el sexo. Murió, literalmente, de risa. Echo una autentica piltrafa, eso sí. Mientras veía la televisión en casa de su benefactora, la baronesa Pannonica de Koenigswarter, una carcajada le provocó un colapso e infarto. El medico que le examinó calculó que el cuerpo, ya sin vida, se correspondía al de una persona de más de 50 años. Si echan las cuentas según las cifras de su nacimiento y muerte que siguen a las de su nombre, verán que, en realidad, falleció a la temprana edad de 35 años. Al día siguiete las calles rezaban la consigna "Bird lives". Bird era su apodo, abraviatura de Yardbird, su primer mote.



Buddy Holly (1936 - 1959)

El gafapastoso líder del mítico grupo de rock norteamericano The Crickets murió en un accidente de avión junto a The Big Bopper y Ritchie Valens a la tempranísima edad de 23 años. Fue una de las muertes más lloradas de la historia del rock por su imagen pública de chico majo e inocente. Para la historia de la cultura popular quedarán homenajes a su figura como la canción de Don McLean, American Pie. "The day the music die", cantabla el amigo McLean.



Graham Bond (1937 - 1974)

Líder de la banda de rhythm & blues, The Graham Bond Organisation, se lanzó al metro en la londinense estación de Finsbury Park. Después de un relevante historial de abuso de diferentes sustancias, Bond se sumió en una depresión tras la ruptura de su banda en 1967. Sus repentinos y bruscos cambios de humor, conducta errática y episodios maníacos, unidos a la mentada depresión, le llevaron a esa terrible decisión.



Roy Buchanan (1939 - 1988):

Este mítico guitarrista blues también engrosa las listas de muertes polémicas del mundo de la música. Después de muchos años marcados por los arrebatos etílicos, Buchanan puso fin a su vida ahorcado en una celda en Reston, Virginia. Había sido detenido después de que una disputa doméstica en la que su señora acabó llamando a la policía. Algunos de sus amigos se enfrentaron a su familia a cuenta de la verdadera causa de su muerte. Oficialmente, Roy Buchanan se suicidó.

10.6.06

Lógica catódica: Punk reality

Renovarse o morir, eso dicen. Y ante esta terrible disyuntiva, inter shitty 2073, el blog con el aspecto más soso de todo el ciberuniverso, ha decidido unirse al saqueo generalizado de ese portal de felicidad audiovisual de obligada visita que es youtube y optar por introducir el formato vídeo al blog. Hoy recuperando toda una joya con casi cuarenta años de edad. Y es que, en nuestro particular divagar por el espacio tiempo, hoy viajamos hasta el show televisivo de Bill Grundy en 1976. Una época en que la televisión, que por aquel entonces ya presidía los salones de la familia occidental, todavía conservaba ese mínimo de decencia que ha ido perdiendo progresivamente con el paso del tiempo. Eso es lo que se cuenta, al menos. En el 76 en mi casa no teníamos televisión.




1976 fue el año de lanzamiento del posteriormente revolucionario Video Home System, popularmente conocido como VHS, y también la fecha de inicio del punk como hito discográfico encargado de desplazar de las listas de ventas a dinosaurios del rock sinfónico. Y los Sex Pistols eran el grupo de moda, precursores de un movimiento que encandilaría a buena parte de la juventud occidental bajo el lema del No Future y otras zarandajas propias del marketing punk.

Ésta fue la segunda experiencia televisiva de los Pistols, después de haber aparecido en el show de Tony Wilson en Granada TV interpretando Anarchy in the UK. Ellos eran la cabeza visible de una nueva generación de músicos de la que recelaban padres, educadores y gobernantes. Y Bill Grundy, desde los estudios de la ITV, decidió dejar un hueco de su programa Today, para hacer un par de pregunta al grupo, que acababa de aceptar una oferta de 40.000 libras de la compañía EMI.

A diferencias de eventos históricos similares, como la aparición de los Beatles en el show de Ed Sullivan (doce años anterior), los exitosos jóvenes abanderados de la nueva generación de músicos "juveniles" no vestían de etiqueta y sonreían amablemente las preguntas del entrevistador. Esta fue la presentación en antena de los Sex Pistols para toda la nación. Vean...




El veterano showman Grundy, que ostentaba una conocida fama de bebedor, no desperdició ni un segundo de estos dos minutos de entrevista. Sentados en frente suya están Johny Rotten, Steve Jones, Paul Cock y Glen Matlock, la formación original de los Sex Pistols, y a sus espaldas los Bromley Contingent, entre los que se encontraba Siouxsie Sioux, la dama aberrantemente maquillada a la derecha de la imagen. Una especie de Alaska primitiva.

El climax de la entrevista pronto se desmadra cuando Grundy intenta hacer una comparación entre los Pistols y una lista de clásicos "Beethoven, Mozart, Bach y Brahms". "Son maravillosos, nos ponen cachondos", contesta un jovencísimo John Lyndon. "¿Crees que ponen cachondo a otra gente?", continua Grundy. "Esa es su mierda", responde Lyndon. Aunque éste intenta dejar pasar el hecho de que ha pronunciado una "palabrota" en televisión, Grundy le invita a que la repita. A todo esto, Siouxie confiesa al entrevistador que "siempre había querido conocerlo". "Nos conocemos después ¿vale?" es la respuesta de Grundy. Jones se suma a la conversación increpando al periodista, "viejo pervertido". El arrebato alcohólico de Grundy no se queda ahí, y como postre anima a los punks a que digan algo escandaloso en los últimos diez minutos de programa. "Sucio hijo de puta", "Puto cabrón"...

Mientras los créditos desfilaban por la pantalla, y con una retahíla de juramentos a sus espaldas, Grundy se despedía de la audiencia hasta el día siguiente y de los Sex Pistols hasta nunca.

A la salida un coche en marcha, propiedad de la discográfica, esperaba al grupo. La centralita de la ITV se colapsaba con cientos de llamadas de espectadores indignados. "El lenguaje más vulgar que jamás se ha visto en la televisión británica", comentaba al día siguiente la prensa. Nada volvió a ser lo mismo para Grundy, al que creo que vetaron de la caja tonta per secula seculorum, ni para los Pistols, que solo puedieron atender 7 de las 24 actuaciones que tenían preparadas para la gira de "Anarchy in the UK". EMI acabó por deshacerse de ellos, aunque todavía les quedaban un par de éxitos importantes, como la publicación al año siguiente de God Save the Queen y su único álbum Never Mind the Bollocks.

Hace un par de años Lyndon, imaginamos que bastante pasado de vueltas, volvió a la actualidad catódica como participante de la versión inglesa de la isla de los famosos. Sin tanta suciedad, ni alcohol. El punk ya llevaba muerto casi treinta años.

(¿Blogger está siempre averiado o sólo me pasa a mí?)

Web Counter
Hit Counters

Powered by Blogger